Ernesto Nemer, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor, informó que en las últimas 72 horas realizó 120 visitas de verificación a gasolineras de todo el país, encontrando irregularidades en 58 casos, lo que derivó en la inmovilización de 102 mangueras. Entre las anomalías detectadas se encuentra la entrega de litros incompletos y estaciones que se negaron a ser verificadas.

El funcionario señaló que no se tolerará ningún abuso en contra de los consumidores e instruyó a todo el personal de verificación de combustibles a intensificar sus recorridos para detectar abusos.

La Procuraduría informó que las penalizaciones para los establecimientos donde se detectó la venta de litros incompletos, se impondrán sanciones económicas de hasta 4.1 millones de pesos, que pueden duplicarse en caso de reincidencia. En tanto, en los casos en los que se ha detectado otro tipo de irregularidades, la Profeco informará a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para que proceda conforme a la ley.

La dependencia denunciará ante la Procuraduría General de la República a las estaciones que se negaron a ser verificadas, ya que existe la presunción de que no se entregan litros completos.

De acuerdo con la Profeco, las denuncias contemplan penas de hasta 6 años de prisión a quien enajene o suministre gasolinas o diésel con conocimiento de que está entregando una cantidad inferior desde 1.5 por ciento a la cantidad que aparezca registrada por los instrumentos de medición que se emplean para su enajenación o suministro. Mientras que las personas que alteren los sistemas de medición pueden alcanzar una sanción de hasta 18 años de cárcel.

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