Después de las innumerables quejas e inconformidades respecto al aumento en el precio de los combustibles y el gasolinazo programado para el mes de enero, el Gobierno decidió dar marcha atrás a la liberación de la gasolina y el diésel.

Con esta decisión, el tope en el precio de la gasolina Magna, Premium y el Diésel se ubicará en $13.98, 14.81 y 14.63, respectivamente, con la posibilidad de bajar hasta los 10.50 por litro.

 “Esta decisión se tomó pensando en las repercusiones económicas que tendría la flexibilización en el precio de los combustibles en estos momentos, especialmente después del triunfo de Donald Trump en Estados Unidos y la constante devaluación del peso”, explicó Javier Ruiz, vocero de la Organización Mexicana del Petróleo.

“Que el gobierno cancele la liberación me regresa la tranquilidad, pues la verdad el aumento si estaba bien manchado”, comentó Alfredo, automovilista de la CDMX.

Luis Castro Villalobos, economista de la UNAM, señaló que frenar la liberación del precio de los combustibles beneficiará a los conductores mexicanos, quienes podrán adquirir gasolina de calidad a buen precio. Sin embargo, detalló que esta decisión podría acarrear conflictos internacionales, debido a la cancelación de contratos con empresas gaseras de Estados Unidos y Europa.

No tome en serio esta nota, recuerda que hoy es 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes.

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